Internacional -
Choques violentos
La huelga general paraliza Grecia
Tan sólo en Atenas, unas 20.000 personas han salido a las calles para expresar su malestar por la política de ahorro.
EITB
Una nueva huelga general ha paralizado hoy la vida pública en Grecia, en una jornada en la que se han registrado enfrentamientos entre policía y manifestantes, en medio de los rumores sobre la necesidad de nuevas ayudas financieras.
Los servicios administrativos, las escuelas, el transporte público y decenas de vuelos nacionales e internacionales se han visto afectados por esta protesta en contra de la política de austeridad impulsada por el Gobierno socialista.
Tan sólo en Atenas, unas 20.000 personas han salido a las calles para expresar su malestar por la política de ahorro.
La Policía griega ha lanzado gases lacrimógenos para dispersar a las decenas de manifestantes que se habían congregado en el centro de Atenas este miércoles.
En la capital, miles de griegos han marchado por el centro de la ciudad para protestar contra las medidas de austeridad que se ha visto obligado a adoptar el Gobierno heleno para recibir el rescate financiero por parte de la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Desde la madrugada han empezado a dejar de funcionar varías líneas de transporte público en Atenas, aunque el servicio se ha reactivado a media mañana para facilitar la asistencia a las manifestaciones convocadas por los sindicatos en el centro de la capital. La huelga ha afectado en general a las empresas estatales que el Gobierno quiere privatizar para reducir la enorme deuda del país mediterráneo. Además, los Ayuntamientos, las guarderías, los colegios públicos y los bancos han permanecido cerrados. El tráfico aéreo se ha visto interrumpido entre las 09:00 y las 13:00 GMT por la participación en la huelga de los controladores aéreos, lo que ha llevado a cancelar o modificar cientos de vuelos. La huelga es la respuesta de los sindicatos a las intenciones del Gobierno de aplicar un nuevo plan de austeridad con el fin de recaudar hasta 2015 unos 76.000 millones de euros mediante la privatización de empresas estatales y la venta de bienes públicos, para reducir el déficit público.