Política -
Parlamento de Navarra
El Gobierno de Navarra revalida su respaldo, aunque con algunas críticas
Navarra Suma ofrece su abstención para aprobar los Presupuestos del año que viene, pero a cambio exige que la presidenta María Chivite renuncie a los apoyos de EH Bildu.
AGENCIAS | REDACCIÓN
Euskaraz irakurri: Chivitek gobernatzeko babesari eusten dio, baina hainbat kritika jaso ditu
El primer debate de política general sobre el Estado de la Comunidad, sin público y con aforo reducido incluso para los parlamentarios, ha reflejado el apoyo mayoritario que mantiene el Gobierno entre los grupos, aunque el respaldo no ha estado libre de algunas críticas y no solo desde las filas de Navarra Suma.
En su intervención, la presidenta María Chivite ha querido recordar en primer lugar a las víctimas de esta pandemia y agradecer el esfuerzo de cuidadores y personal del ámbito sanitario.
Además, ha defendido un modelo innovador e igualitario en un marco de una convivencia plural, para lo que ha invitado al consenso, sin renunciar a las legítimas diferencias, y a ir de la mano de ciencia en la lucha contra la pandemia.
"No queremos salir de esta crisis asumiendo un alto coste en vidas, no queremos más precariedad laboral ni más brecha salarial, más desigualdad ni mucho menos queremos polarización, confrontación y tensión política y social", ha subrayado, y ha añadido que "en estos tiempos inciertos, tenemos que trasladar serenidad y las certidumbres que podamos, dentro de un marco de incertidumbre mundial".
Tras un repaso de lo realizado en cada departamento, la presidenta ha sostenido que las políticas del Gobierno de Navarra "están alineadas y comprometidas con la agenda 2030 y con el marco europeo que pone el acento en la digitalización, el pacto verde y la inclusión".
Y en ese sentido ha asegurado que, aunque la COVID-19 ha trastocado muchos de los planes, la crisis que ha provocado no afecta a la apuesta por la sanidad, por fortalecer los servicios públicos, impulsar una economía innovadora e inclusiva, atajar brechas con un fuerte compromiso con las personas más vulnerables, y avanzar hacia un modelo de crecimiento más sostenible.
Para Javier Esparza (Navarra Suma), sin embargo, éste es un Gobierno “continuista, con políticas nacionalistas de la anterior legislatura, y sin capacidad de gestión” en los 15 meses transcurridos desde su investidura. Le ha reprochado además “presidir pero no liderar” y ha señalado que el Gobierno “se lo dirigen otros”.
Esparza ha ofrecido a la presidenta una "abstención” para los Presupuestos de 2021 y otras áreas fundamentales, que le permita “desligar a Navarra de EH Bildu”, una propuesta que no pretende "tumbar el Gobierno" sino "ayudar a Navarra y a los navarros y navarras".
La portavoz de EH Bildu, Barkartxo Ruiz, ha criticado también el modo de entender el liderazgo que tiene el Gobierno, ya que los grupos se enteran muchas veces por los medios de comunicación de las medidas decididas, ha pedido apoyo a sectores como la hostelería y ha reclamado diálogo con los afectados, todo para una reconstrucción "innovadora".
Ha reprochado también haber sido "convidados de piedra" en el Plan Reactivar Navarra y ha echado de menos "medidas valientes", ha calificado de "incompatible" el TAV con una sociedad más justa y cohesionada, y ha dudado de que la segunda fase del Canal, sobredimensionado a su juicio, tenga encaje en el pacto verde para recibir fondos europeos.
Un análisis muy distinto ha hecho el portavoz parlamentario del PSN, Ramón Alzórriz, quien ha apostado por "desterrar conflictos y abrazar consensos" en beneficio de la ciudadanía navarra y ha instado a los grupos a "dejar atrás" en este momento de crisis las diferencias políticas.
Con la llegada de la pandemia, ha dicho, la presidenta Chivite "no se arrugó, no se escondió" e impulsó "medidas duras pero necesarias" para luchar contra una pandemia que "no es culpa de nadie" pero que precisa de la colaboración de todos "para salir de ella". "La sociedad pide unidad política, desterrar conflictos y abrazar consensos", ha destacado.
Por su parte, la portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, ha mostrado el apoyo de su grupo al Gobierno en las medidas adoptadas para frenar el coronavirus pero ha apostado por romper inercias respecto a Madrid.
Tras indicar que a Geroa Bai le preocupa el "cheque en blanco" que ofrece Navarra Suma, ha reclamado autogobierno y no inercia de lo que se hace en Madrid para construir "al margen de los vaivenes del Estado", punto en el que ha calificado de "patéticas" algunas actuaciones de Na+ en las Cortes Generales.
El portavoz de Podemos, Mikel Buil, ha llamado a revisar "el llamado contrato social, un contrato que implica que la ciudadanía ceda sus libertades y asuma deberes sociales, a cambio de ver garantizada su subsistencia".
Buil ha señalado al Gobierno que "hay algo que no estamos haciendo bien" ante la incidencia del coronavirus en Navarra y ha lamentado que "a pesar de ser una comunidad con las medidas más restrictivas, tengamos una incidencia que nos sitúa en el riesgo extremo de un contagio exponencial".
Ha cerrado la primera ronda de intervenciones de los grupos la portavoz de Izquierda-Ezkerra, Marisa de Simón, quien ha pedido al Gobierno de "centro izquierdas" una reforma fiscal que permita afrontar las necesidades derivadas de la pandemia pero también políticas sociales para superar "problemas estructurales".