Calparsoro: 'La mayoría de los casos se archivan por falta de pruebas'

El fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, ha explicado este miércoles que la mayoría de los casos investigados en Euskadi por supuesto robo de bebés ocurridos entre los años sesenta y ochenta del siglo XX, se están archivando por falta de indicios.En la presentación de la memoria de la Fiscalía del País Vasco de 2011, Calparsoro ha explicado que "casi todos" los casos denunciados en Araba están siendo sobreseídos por falta de pruebas que acrediten ese supuesto secuestro o robo de recién nacidos, en Bizkaia se están archivando porque los delitos han prescrito y en Gipuzkoa, tampoco se han registrado acusaciones.Según el fiscal, "desde una perspectiva sociológica e histórica, parece claro que en la España anterior a 1977", se dejó "en manos privadas" muchos casos de adopciones que fueron irregulares pero no por ello puede determinarse que hubiera sido supuestos de robos de niños.Así, ha explicado que algunas órdenes religiosas gestionaban "con el consentimiento tácito de las autoridades" esas adopciones que se hacían "de manera irregular" y "sin las garantías necesarias".Calparoso ha constatado que se han practicado algunas exhumaciones en las que no se han encontrado el cuerpo de los bebés que supuestamente fallecieron después de nacer, según se explicó entonces a sus familias, y ha añadido que esos casos aún están siendo investigados por parte de los forenses.En este sentido, ha valorado las indagaciones realizadas por parte de la Ertzaintza y en las tres fiscalías, y ha asegurado que su intención sigue siendo "llegar hasta el final o hasta donde se pueda" porque, según ha reconocido, es "pesimista" sobre la posibilidad de que vayan a esclarecer todos los casos denunciados.

Calparoso ha querido situar históricamente esas adopciones irregulares y ha apuntado que, "más que una trama" de robo de niños, entonces ocurría "una falta total" de la garantía de los derechos de las mujeres que iban a dar a luz.

El fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, ha explicado este miércoles que la mayoría de los casos investigados en Euskadi por supuesto robo de bebés ocurridos entre los años sesenta y ochenta del siglo XX, se están archivando por falta de indicios. En la presentación de la memoria de la Fiscalía del País Vasco de 2011, Calparsoro ha explicado que "casi todos" los casos denunciados en Araba están siendo sobreseídos por falta de pruebas que acrediten ese supuesto secuestro o robo de recién nacidos, en Bizkaia se están archivando porque los delitos han prescrito y en Gipuzkoa, tampoco se han registrado acusaciones. Según el fiscal, "desde una perspectiva sociológica e histórica, parece claro que en la España anterior a 1977", se dejó "en manos privadas" muchos casos de adopciones que fueron irregulares pero no por ello puede determinarse que hubiera sido supuestos de robos de niños. Así, ha explicado que algunas órdenes religiosas gestionaban "con el consentimiento tácito de las autoridades" esas adopciones que se hacían "de manera irregular" y "sin las garantías necesarias". Calparoso ha constatado que se han practicado algunas exhumaciones en las que no se han encontrado el cuerpo de los bebés que supuestamente fallecieron después de nacer, según se explicó entonces a sus familias, y ha añadido que esos casos aún están siendo investigados por parte de los forenses. En este sentido, ha valorado las indagaciones realizadas por parte de la Ertzaintza y en las tres fiscalías, y ha asegurado que su intención sigue siendo "llegar hasta el final o hasta donde se pueda" porque, según ha reconocido, es "pesimista" sobre la posibilidad de que vayan a esclarecer todos los casos denunciados.Calparoso ha querido situar históricamente esas adopciones irregulares y ha apuntado que, "más que una trama" de robo de niños, entonces ocurría "una falta total" de la garantía de los derechos de las mujeres que iban a dar a luz.