Absuelto el ginecólogo acusado de provocar la parálisis de un niño

La titular del juzgado de Primera Instancia número 10 de Bilbao ha absuelto a los cuatro demandados: el médico que intervino en el parto, su aseguradora, la clínica donde nació el niño y el Igualatorio Médico Quirúrgico. Además, ha considerado que no está probado que la actuación del ginecólogo causara la parálisis del menor.

La sentencia, contra la que cabe recurso ante la Audiencia Provincial, cree probado que el 13 de septiembre del 2003, durante el parto en una clínica de Bilbao, el feto comenzó a sufrir "una bradicardia que dura 33 minutos" y que el médico "esperó aún unos minutos a que se diesen las condiciones para un parto vaginal" y entonces decidió "emplear una ventosa para acortar el expulsivo".

Según se añade, "técnicamente la aplicación de la ventosa fue correcta" y asegurar, como lo hacen los demandantes, que con una cesárea el niño hubiera salido antes, "es una especulación", sobre la que no se puede basar una demanda de imprudencia médica,argumenta el fallo.

Así, se considera probado que la asfixia fue la causa de la parálisis cerebral que sufre el niño.

En consecuencia, el juzgado ha rechazado que los demandados indemnizaran a la familia con 800.000 euros por los daños físicos, 1 millón por daños morales y 1,2 millones más para cubrir los gastos procesales.