Sociedad -
Sentencia
El asesino de Clara Rangel, condenado a 28 años
La mujer, de 33 años, fue asesinada en diciembre de 2008 en su domicilio de Errenteria.
Redacción
El compañero sentimental de Clara Rangel, la mujer de 33 años que murió acuchillada en diciembre de 2008 en su domicilio de Errenteria (Gipuzkoa), ha sido condenado a penas que suman 28 años de prisión por este crimen, además de por intentar matar al hijo de la fallecida y herir a su propio hermano.
El pasado 21 de mayo un tribunal del jurado, presidido por el magistrado Augusto Maeso, declaró al procesado culpable del asesinato de Clara Rangel, así como del intento de homicidio del hijo de la mujer -un joven de 16 años fruto de una relación anterior-, y de un delito de lesiones por las heridas que causó a su hermano cuando éste intercedió para intentar evitar la agresión.
El jurado apreció además la agravante de parentesco en los tres delitos, aunque aplicó también al encausado la atenuante de trastorno mental por consumo de alcohol en las agresiones que perpetró sobre los dos varones.
La sentencia del caso contempla indemnizaciones que suman 132.838 euros para los tres hijos y los padres de Clara Rangel, así como una compensación total de 11.059 euros para el hijo mayor de la fallecida.
Además, la resolución judicial impide al encausado aproximarse al hijo mayor de Clara Rangel o comunicarse con él durante diez años.
Los hechos
La sentencia recuerda que los hechos juzgados ocurrieron sobre las 12:00 horas del 29 de diciembre de 2008, en el dormitorio del domicilio que la pareja compartía en Errenteria, donde el acusado y su víctima mantuvieron una discusión.
El hombre acudió entonces a la cocina, cogió un cuchillo de un solo filo y regresó a la habitación, donde la apuñaló repetidamente.
El texto aclara que la mujer "no tuvo ninguna posibilidad de defenderse" ya que la agresión se produjo "de forma sorpresiva" cuando "se encontraba tumbada en la cama junto a sus dos hijos, uno de seis meses y otro de dos años, y convaleciente tras haber sido sometida a una operación de abdominoplastia".
Al escuchar los gritos de su madre, el hijo mayor acudió a la habitación y se acercó al acusado para intentar evitar que continuara la agresión, pero éste le asestó tres cuchilladas.
Seguidamente, llegó al dormitorio el hermano del ahora condenado, quien se abalanzó sobre el asesino "para quitarle el cuchillo", aunque el imputado le acometió antes y le apuñaló.
"Después de cometer los hechos, el acusado se causó a sí mismo, con un cuchillo, heridas en el cuello, abdomen y muñeca, de las que fue intervenido quirúrgicamente en el Hospital Donostia", concluye la sentencia.