Sociedad -
Semana Europea de la Movilidad
Distintivos ambientales: ¿Qué se puede hacer si tenemos un coche antiguo?
Los vehículos de gasolina matriculados antes de 2001 y los diésel anteriores a 2006 no tienen derecho a distintivo ambiental para poder entrar a las zonas de bajas emisiones. No obstante, en algunos casos, no está todo perdido y se pueden realizar algunas modificaciones.
A.A.E. | EITB Media
Puede darse el caso de que tengamos un coche antiguo y no queramos deshacernos de él, pero que necesitemos un permiso especial o un distintivo ambiental para entrar en una zona de bajas emisiones de alguna ciudad. ¿Qué podemos hacer?
En primer lugar, deberemos comprobar si la ciudad a la que queremos entrar otorga algún permiso para nuestro vehículo. El experto en movilidad, Oier Martínez Violet, explica que algunas ciudades como Barcelona dan salvoconductos especiales para algunos días concretos. Son licencias que generalmente se pueden tramitar vía online en la web del ayuntamiento.
Si ese no es el caso y queremos modificar el sistema de alimentación de nuestro coche, existen algunas opciones, aunque no son muy económicas. Dependiendo de las características y el estado del coche, las opciones que podemos tener son varias en palabras del director técnico de la ITV de Beasain Josu Velasco Iza.
Por un parte, podríamos actualizar el motor sin cambiar el combustible, es decir modificar la unidad motriz bien sea un motor con encendido por chispa (gasolina) o por un motor de encendido por compresión (diésel). Es probable que esta opción nos obligue a cambiar el sistema de admisión y escape del coche.
Otra opción es reconvertir el coche para que funcione con gas (GLP, GNC...) o con hidrógeno. En este último caso, tenemos dos posibles vías: hidrógeno como pila de combustible o como combustible para combustión en cámara con oxígeno.
Finalmente, podríamos electrificar el coche cambiando el motor, las baterías y los sistemas adyacentes. No obstante, en algunos vehículos esta reforma no suele ser viable debido a la adaptación de los ejes, la ubicación de las baterías...
Una vez realizados todos los cambios correspondientes, el vehículo tendrá que pasar una inspección en una ITV para homologar los cambios. Si todo es correcto, la reforma pasará a anotarse en la ficha técnica del vehículo.
No obstante, para que todo el proceso sea legal y se pueda homologar, Velasco recomienda acudir, en primer lugar, a un profesional, un ingeniero de reformas que realizará un estudio de la situación actual del coche y la viabilidad de la mejora que queremos hacer. Asimismo, esta persona nos podrá guiar en todo el proceso.
Todo este proceso lleva su tiempo y suele ser económicamente costoso, según reconoce Velasco, por lo que son muy pocos aquellos que optan por una estas opciones. "En algunos casos, los coches valen menos de lo que puede costar renovar todos los componentes necesarios, por lo que la mayoría opta por comprar un coche nuevo", asegura.
Según su experiencia, los cambios más frecuentes en nuestro entorno son los cambios de motor, pero sin cambiar el tipo de combustible. Sin embargo, puntualiza que estos cambios no se hacen por conseguir un distintivo, sino porque el motor anterior no funcionaba.