Egibar acusa a Sortu de gestionar mal el fin definitivo de ETA

El portavoz del PNV, Joseba Egibar, se ha dirigido hoy a la izquierda abertzale para defender que la "velocidad" con la que Cataluña afronta la demanda del derecho de autodeterminación es posible gracias a que todos los partidos nacionalistas han usado siempre "vías democráticas y pacíficas".

En su intervención en el pleno de Política General del Parlamento Vasco, Egibar ha instado a "quienes dicen creer en el Estatuto de Gernika" a que lo cumplan y transfieran las transferencias pendientes.

Ante la ley de consultas que va a plantear EH Bildu, el portavoz del PNV ha advertido de que el "corazón" del proceso para lograr un nuevo estatus jurídico-político debe ser alcanzar un "acuerdo democrático" en el seno de la ponencia de autogobierno.

Ante la defensa por parte del presidente de Sortu, Hasier Arraiz, del camino emprendido en Cataluña, el dirigente del PNV ha defendido que "en Cataluña el proceso va a la velocidad que lleva porque los partidos nacionalistas han usado siempre vías democráticas y pacíficas".

Además, ha subrayado que las marchas a favor de la independencia impulsadas por movimientos populares "no acaban en una campa sino en las instituciones".

Pacificación

En materia de paz y convivencia, Egibar se ha dirigido a la izquierda abertzale para preguntarse si "se puede gestionar peor el final de ETA".

"No se han dado pasos efectivos ni en el desarme ni en el reconocimiento del daño causado", ha señalado el portavoz nacionalista.

Al mismo tiempo, ha rechazado que un "final policial" de ETA garantice una desaparición total de la organización y ha defendido que "un final ordenado de la violencia" requiere por parte del Gobierno central "menos triunfalismo, menos unilateralidad y más prudencia".

Egibar también ha defendido la necesidad de superar las "visiones parciales" sobre la violencia y de lograr una "visión integral" para evitar "una memoria parcial de lo que ha ocurrido".

Así, ha planteado que se debe reconocer a todas las víctimas de organizaciones como el GAL, al tiempo que ha advertido de que un compromiso con los derechos humanos “es absolutamente incompatible con una mirada olvidadiza de lo que fue ETA".