Turquía

Equipos turcos y de varios países europeos han participado en la evacuación del espeleólogo estadounidense Mark Dickey, atrapado desde hace días a unos mil metros de profundidad en la cueva de Morca en el sur de Turquía a causa de una dolencia de estómago.

En Argelia, 34 personas han muerto en los incendios y 19 personas han sido detenidas por su presunta implicación. En Grecia, el fuego asola las islas de Rodas, Corfú y Eubea. En Italia, los incendios están fuera de control en Sicilia, provincia de Palermo.

En Turquía, clara victoria de Erdogan en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas ayer, aunque el principal opositor recorta distancias.

En los últimos 20 años, el Gobierno turco ha estado en manos de Erdogan. El mandatario obtuvo hace dos semanas el 49,51% de los votos y Kiliçdaroglu, el 44,89%. La participación rondó el 89%. Este domingo será la cita definitiva. Erdogan parte como favorito.

Con el 99 % del voto ya contabilizado, el islamista Recep Tayyip Erdogan ha logrado el 49,4 % de los votos y su principal rival, el socialdemócrata Kemal Kiliçdaroglu, el 44,96 %. Ningún candidato ha logrado superar el 50 % de las papeletas, por lo que habrá segunda vuelta.

Los dos principales candidatos, el propio presidente y Kliçdaroglu, el líder de la oposición, ya han votado. La oposición se ha unido con el objetivo de derrocar a Erdogan, y las encuestas le otorgan la victoria.

la crisis económica o la gestión del terremoto han desgastado la imagen del líder islamista, aunque en sus bastiones, algunos de ellos muy afectados por el seísmo, mantiene un apoyo firme.

Desde que comenzó la guerra, Turquía ha sido el país que más refugiados ha recibido. Concretamente, ha recibido a 3.600.000 refugiados y esto se ha vuelto tema central de la campaña electoral: la oposición quiere que se les expulse del país.

A pocos días de las elecciones turcas, Mikel Ayestaran ha regresado a Antioquía, la zona cero. Allí, muchas familias continúan la búsqueda de familiares desaparecidos entre los escombros, y no hay ambiente electoral.

El partido kurdo, tercera fuerza del país, ha pedido a sus votantes que apoyen a la oposición. Ese voto podría ser decisivo para acabar con el mandato de Erdogan.

El gobierno de Erdogan podría tener sus días contados, ya que las encuestas auguran la victoria a su mayor rival, eso sí, con muy poco margen. A una semana de las elecciones, la presión contra la prensa aumenta, especialmente contra los medios de comunicación kurdos.

El representante de Rusia en la Asamblea Parlamentaria de Cooperación Económica del Mar Negro que se está celebrando en Ankara (Turquía) ha arrebatado una bandera de Ucrania a un diputado ucraniano. Éste le ha respondido con golpes.

Al menos catorce personas han muerto y cinco están desaparecidas por las inundaciones en varias de las provincias turcas que el pasado 6 de febrero quedaron arrasadas por dos seísmos que dejaron más de 48.000 muertos.

Al parecer, todos tienen en común que viajaron a Turquía para inyectarse bótox en el aparato digestivo, un tratamiento para adelgazar que no se realiza aquí, ni en todo el mundo. Turquía investiga lo ocurrido.

Cientos de edificios están completamente derrumbados en el sur de Turquía como en el occidente de Siria y Kurdistán. Mientras, continua el sufrimiento para miles de familias. Solo en Turquía el seísmo ha dejado casi dos millones de personas desplazadas. La cifra de fallecidos asciende a los 50 000.

Las cifras oficiales hablan de más de 50 000 muertos, pero el Colegio de Médicos de Turquía considera que son muchos más los muertos en los terremotos de hace un mes.

Un temblor de magnitud 6,4 ha sacudido la provincia turca de Hatay, una de las mas afectadas por la catastrofe de hace 15 días. Este terremoto ha tenido epicentro en la ciudad de Antioquia, y se ha sentido también en países vecinos.

En Turquía, muchas personas se han quedado sin nada tras los terremotos; algunas viven en la calle y, otras, en los campamentos. Pero esos lugares se están desmantelando y el futuro de los allí presentes es incierto. Los afectados creen que, pronto, el mundo se olvidará de ellos.

La cifra de fallecidos asciende ya a más de 43.000 personas. En muchos nichos no hay nombres, sólo números, porque las víctimas no han sido identificadas.

Los equipos de emergencia han rescatado con vida a un niño de 12 años que permanecía atrapado entre los escombros de un edificio en la provincia turca de Hatay 260 horas después de los terremotos del pasado 6 de febrero.